Maribel preparaba el estofado mientras, de fondo, Obama hablaba sobre el Tsunami en Japón.
- ¿Y éste quién se cree que es? ¿El presidente del mundo?
- ES el presi del mundo, vos que te pensás... ¿le falta mucho a eso? le contestó Héctor, su marido.
- Le falta un rato, hacete unos mates viejo... (pensativa mientras revuelve, busca las palabras para expresar su idea)
- ...sabés que pasa... me indigna... los yanquis y muchos giles pensaban que el muñeco éste iba a cambiar algo, pero no...
- En eso tenés razón mujer, es como comprar picada común o especial, te gastás un mango más pero a fin de cuentas es lo mismo.
- ¡No hay Yerba! (Maldice en voz alta)
- Me voy a lo de Mario a comprar.
Y salió por la puerta, silbando bajito, como quien no quiere la cosa, aquel tango de Discépolo.
Si si obama es todo lo que quieran, pero bien querríamos estar como los yankees
ResponderEliminarq FlojO
ResponderEliminar